Las nuevas penitenciarías, incluyendo instalaciones de máxima seguridad, podrían entrar en funcionamiento durante el primer semestre de 2024, según recientes declaraciones del ministro de Justicia, Ángel Barchini, quien destacó la importancia de este proyecto, subrayando la necesidad de mejorar las condiciones carcelarias en el país. Estaríamos hablando de tres penitenciarías, dos en Emboscada, Cordillera y una en Minga Guazú, Alto Paraná.
El ministro detalló que se encuentra planificado el proceso de equipamiento para las nuevas dependencias penitenciarias. Sin embargo, también señaló la necesidad de ampliar el presupuesto asignado para garantizar la puesta en marcha de las tres nuevas cárceles que han sido entregadas a la cartera de Estado a su cargo.
En un esfuerzo por abordar la situación de hacinamiento en las cárceles paraguayas, Barchini reveló que se requieren 800 nuevos agentes penitenciarios para cubrir las demandas de las nuevas instalaciones. Además, se están llevando a cabo trabajos de adaptación en las cárceles existentes para recibir a los nuevos reclusos que serán trasladados a las nuevas instalaciones.
Paraguay enfrenta actualmente desafíos significativos en su sistema penitenciario, siendo uno de los países con mayor cantidad de reclusos sin condena y sin una clara separación entre prevenidos y condenados. El hacinamiento es una realidad en todos los penales del país, siendo la prisión de Tacumbú la que presenta el mayor número de reclusos en condiciones de hacinamiento.
Con el objetivo de enfrentar estos desafíos y mejorar las condiciones del sistema carcelario, el Ministerio de Justicia está comprometido en avanzar con la implementación de estas nuevas cárceles, contribuyendo así a la seguridad y bienestar tanto de los reclusos como del personal penitenciario.
Imagen: Penitenciaría Regional de Emboscada.
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