La capital paraguaya se ha convertido en un destino atractivo para el mercado inmobiliario premium, con compradores locales e internacionales que buscan mucho más que metros cuadrados.
En los últimos años, Asunción ha ganado protagonismo como un mercado residencial de alta gama, donde el valor de un departamento no se mide únicamente por su superficie, sino por las experiencias, amenities, ubicación y estilo de vida que ofrece.
El segmento de compradores es cada vez más diverso. Entre los nacionales, se destacan adultos mayores de alto nivel socioeconómico que buscan comodidad y privacidad en espacios adaptados a su nueva etapa de vida; parejas jóvenes que priorizan ubicación, servicios y vida social; y personas divorciadas que optan por espacios independientes para rediseñar su estilo de vida.
También hay una presencia importante de extranjeros que llegan por negocios, principalmente de Brasil, Argentina y Bolivia, atraídos por propiedades bien ubicadas para uso personal o renta. A este grupo se suman inversores nacionales e internacionales que apuestan a unidades de gran metraje como resguardo de valor y fuente de renta estable.
Otros segmentos destacados incluyen visitantes regionales de alto perfil, que eligen Paraguay por su estabilidad, y europeos que consideran al país como un “Plan B” por su calidad de vida y ubicación estratégica.
Con información de Revista FOCO/Imagen: Freepik.
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